Esta ingeniosa idea posibilita tener pabellones deportivos con pistas de juego en las que tan solo se vean las marcas, pudiendo ser compatible para cualquier deporte ya que solo se iluminaran aquellas que serán útiles, evitando así las canchas con multitud de líneas dibujadas.
El suelo está hecho con paneles de vidrio que tienen una elasticidad y fricción similares a las de las canchas de pista cubierta convencionales, proporcionando el mismo tipo de bote de pelota que un suelo de madera. Justo debajo de la capa de vidrio están situadas unas guías por la que discurren tiras de LED, con detectores digitales, para saber cuándo una pelota cayó más allá de la línea. La colocación de LEDs bajo el suelo permite señalar marcas, logos, o cualquier otra información que se quiera proyectar desde la parte posterior del vidrio.
Además, esta nueva tecnología puede fabricarse en una gran variedad de colores y tener diferentes aplicaciones.
Fuente: asbglassfloor.com