Si, por un lado, el proyecto responde a la demanda de un programa de diversos nuevos usos ligado a las artes musicales y corporales, también responde de manera clara y transformadora a una situación física y espacial preexistente, con una vida intensa y con un vecindario fuertemente presente. Por otra parte, crea nuevos espacios de convivencia a partir de la geografía urbana, la historia local y los valores contemporáneos de la vida pública.
El Conservatorio Dramático Musical de São Paulo ocupaba un edificio del siglo XIX - deteriorado y vacío - incrustado en el corazón de una región degradada del centro de la ciudad. Además del importante marco histórico y arquitectónico, albergaba una impresionante sala de recitales, no utilizada durante décadas.
El proyecto de Plaza de las Artes restaura y rehabilita ese edificio, y con el aprovechamiento de una parcela vacía de propiedad municipal, vincula un complejo de nuevas construcciones y espacios de circulación, dotado por las instalaciones necesarias o adecuadas para el funcionamiento de los cuerpos artísticos del Teatro Municipal.
El nuevo conjunto integra las sedes de Orquestas Sinfónicas, corales, ballet, escuelas municipales de música y danza, museo, el Centro de Documentación Artística, además de restaurantes, estacionamientos subterráneos y áreas de convivencia.
La implantación desde el equipamiento cultural, además de atender la histórica carencia de espacios para el funcionamiento del Teatro, desempeña un papel estratégico en la recalificación del área central de la ciudad, una vez que el rico y complejo programa de usos, tiene como prioridad las actividades profesionales y educacionales de la música y la danza, está fuertemente marcado por funciones de carácter público, convivencia y vida urbana.